miércoles, 15 de octubre de 2008

Oscuridad en la noche



Qué ganas me dieron anoche de desenchufar la luna... y bajar a la calle a poder quejarme a oscuras...


Noche tras noche me resigno a la idea de levantarme cada mañana, luchando por no ahogarme entre mis sábanas, aferrándome a la idea de que ganaré la partida a mi alma, ahora rota en tantos pedazos que en el fondo sé que nunca podré pegarlos... Y así, al caer la noche me invade el miedo, la locura se apodera de mí mientras me revuelvo, porque no quiero quererte, pero te quiero, porque quiero entenderte y no te entiendo... Y quisiera salir de mi cuerpo por un momento, y no sentir dolor mientras vuelo, a lo alto del cielo, y sentada en la luna mirarte desde lejos, para decirte adiós y nunca más soñar con que te tengo. Volver a mi cuerpo... y no sentir dolor, ni dormirme en el sonido de mis lamentos, ahogados entre la almohada para no ser descubiertos, despertar en la mañana y no querer seguir durmiendo, afrontar el día con la esperanza de que hoy te quiera un poco menos...


el sol cubrió en ese instante toda mi alma, esta vez no necesite ver tus ojos, pues me di cuenta que era dueña de tu alma , que naciste de entre miles de muertes para volverte a unir a mi en esta viday que no podía perderte , tu no eras mío, yo no era tuya, la vida era nuestra...